LA FE Y LAS OBRAS
¿LA PERSONA SE JUSTIFICA ÚNICAMENTE POR LA FE?
La historia de esta afirmación se encuentra en el fundador del protestantismo, Martín Lutero. Ya sabemos que él se hizo sacerdote sin tener vocación para ello, sólo porque tenía temor de quedar mal con Dios si no le cumplía el juramento que le había hecho en un momento de gran susto al sentir que le caía un rayo a un compañero de viaje. Pero al llegar al sacerdocio Lutero se halló con el problema de tener que guardar castidad sin tener fuerzas para ello. Las tentaciones de su carne lo dominaban como lo dice en sus cartas, y sentía miedo de condenarse por ello. Más al leer la Biblia se encuentra con el siguiente pasaje de san Pablo: "El hombre no es justificado por las obras de la ley sino por la fe en Jesucristo" (Ga 2,16). Y allí creyó Lutero encontrar la solución para su problema. Se dijo "ya está resuelto mi problema.
El cumplimiento de la ley de Dios no me salva. Lo que me salva es la fe en Jesucristo. Así que no importa los pecados que cometa, con tal de que tenga fe. Si creo que Jesús es mi Salvador, mis pecados no se quitan pero quedan cubiertos con su sangre". Esto es lo que afirman los testigos de Jehová, adventistas, mormones, pentecostales, evangélicos, etc., en todas partes, a todas horas y no se cansan de proclamarlo. Pero uno se pregunta: "Por qué cuando un joven le dijo a Jesucristo: "¿Qué debo hacer yo bueno para conseguir la vida eterna?". Jesús en vez de responderle: "Lo único que tienes que hacer para salvarte es tener fe", ¡NO LE RESPONDIÓ ESO! , sino que le dijo: "Si quieres entrar en la vida eterna tienes que cumplir los mandamientos" (Mt 19,17).
Las consecuencias de esta afirmación de los protestantes de que lo único necesario para justificarse, para hacerse santo, es la fe y que el cumplir las obras de la ley de Dios no justifica ni santifica, es algo inmoral y ha llevado a los países de mayoría protestante a una relajación de costumbres tan espantosa que produce pavor. Y allá llegarán nuestros países a medida que esa idea protestante vaya infiltrándose entre nuestras gentes. Si creyendo que para salvarnos y ser santos o justificados es absolutamente necesario cumplir las obras que manda la ley de Dios, ya somos tan malos y pervertidos, qué seremos cuando nos llegue el convencimiento de que el cumplimiento de las obras de la ley de Dios no justifica a nadie, ¿y que basta con tener fe y ya se obtiene la justificación? Es que entender mal una frase de la Sagrada Biblia, como esta de san Pablo a los Gálatas, puede llevar a los peores errores.
Por eso la Iglesia Católica recomienda que la Sagrada Escritura se entienda conforme la explican los Pontífices y los Santos, y no como a cada uno se le antoje. Los católicos decimos: "El hombre no es justificado solamente por cumplir las obras de la ley de Dios, sino primero y sobre todo por la fe en Jesucristo. pero el cumplimiento de las obras que manda la ley de Dios en sus 10 mandamientos es absolutamente necesario para salvarse y obtener la vida eterna".
¿BASTA LA FE PARA SALVARSE, NO HACEN FALTA NUESTRAS OBRAS?
¡TEN MUCHO CUIDADO, NO TE DEJES ENGAÑAR!
LA BIBLIA DICE:
1. "Si yo tuviera fe que trasladara los montes, pero no tengo caridad, nada soy" (1Co 13,2)
2. "Qué le aprovecha hermanos a uno decir: 'Yo tengo fe', ¿Si no tiene obras? ¿Podrá salvarle la fe?" (St 2,14)
3. "Así como el cuerpo si no tiene alma es muerto, así si la fe no tiene obras es muerta" (St 2,26)
Reconocemos: Que la salvación la consiguió Jesucristo gratuitamente, no porque nosotros somos santos si no porque Él ofreció su sangre y sus méritos por nuestros pecados. Nuestra redención es un regalo totalmente gratuito de nuestro Señor Jesucristo. Pero nuestro puesto en la eternidad depende de las buenas obras que hayamos hecho en la tierra, porque:
ASÍ LO DICE LA BIBLIA:
a) "Cada uno recibirá su salario según el trabajo que haya hecho" (1Co 3,8)
b) "El Hijo del Hombre vendrá rodeado de sus ángeles y entonces pagará a cada uno según las obras que cada cual haya hecho" (Mt 16,27)
c) "Dios ha de pagar a cada uno según sus obras" (Rm 2,6)
d) "Cada cual cargará con su propio fardo. Así que examine cada una de sus propias obras" (Ga 6,5)
e) "Una cosa he sabido: que tú, Señor Dios, darás a cada uno según las obras que él haya hecho" (Sal 61,13)
f) "Y fueron abiertos los libros y a cada uno se le dio según las obras que había hecho. Los muertos fueron juzgados de acuerdo con lo que cada uno había hecho" (Ap 20,12)
Nosotros los católicos aceptamos que "sin la fe nadie puede salvarse". Que nosotros somos redimidos por la fe en el Hijo de Dios. Y que "sin fe es imposible agradar a Dios". Pero también reconocemos que la fe necesita ir acompañada de obras, porque así lo dice muy claramente la Sagrada Biblia. Cristo nos dice en los últimos renglones de la Biblia: "Mira pronto vendré, y traeré mi recompensa, para pagar a cada uno según hayan sido sus obras" (Ap 22, 12).
Fuente: ¿Católico o Protestante? Padre Eliécer Sálesman SDB
