CEREMONIA DE CONSAGRACIÓN DE UNA IMAGEN
"JESÚS NAZARENO DE LA MERCED" PRIMER IMAGEN CONSAGRADA DE AMÉRICA
LA CEREMONIA DE CONSAGRACIÓN DE UNA IMAGEN
Hace 300 años se celebró en la otrora Muy Noble y Muy Leal Ciudad de Santiago de los Caballeros del Reino de Guatemala (Hoy la Antigua Guatemala) uno de los ritos mas antiguos y hermosos que se celebran aun en nuestros días en honor a las imágenes que representan a Nuestro Señor y su Santísima Madre, en este caso la primera imagen consagrada en América: La Consagrada Imagen de Jesús Nazareno de la Merced, talla que fue expuesta al culto desde el Sábado Santo 27 de marzo de 1655. Tallada por Mateo de Zúñiga y encarnada por Joseph de la Cerda.
¿Se preguntarán porque el título de Consagrada?
Ciertamente no es un título el que se le otorgue a la imagen si no que la identifica como eso, una imagen consagrada, o sea que ha recibido dicho privilegio...
Se tiene entendido que consagrar es el acto en el que dedica un templo u objeto al culto divino, en el caso de una imagen la consagración consiste en ungir en la cabeza, pecho, manos y pies de las imágenes sagradas.
Estas ceremonias ricas en simbolismo y que se realizan en la parte media de la Eucaristía Solemne, oficiada por un Obispo, posteriormente a la homilía, se dividen en estas partes:
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La Solicitud del párroco o rector del templo en el que se venera la imagen, si es posible incluyendo una breve reseña de la historia de dicha imagen.
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La Aceptación y aprobación de la Consagración por el Obispo de la Diócesis.
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Invocación la Santísima Trinidad y oración de Consagración
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Aspersión con agua bendita a la imagen
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Unción con el Santo Crisma, en la cabeza, pecho, manos y pies haciendo la señal de la cruz en la imagen.
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Imposición de unas cruces pequeñas de oro en los lugares ungidos de la imagen, símbolo o recuerdo de la consagración.
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Firma del Acta de la Consagración
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Oración final
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Continua la eucaristía solemne.
Dependiendo del programa de actividades programado por la hermandad los fastos de una consagración son manifestaciones grandiosas de fe, que pueden incluir estrenos de ajuar ya sea túnica, tunicela o manto bordados en oro, joyas, cruces, estandartes, altares imponentes, conciertos de marchas y si la hermandad lo determina culminar con una procesión extraordinaria.
Estas ceremonias inician en 1717 cuando es consagrado Jesús de la Merced, según cuentan las crónicas fue un acto solemnísimo sin precedentes en el nuevo mundo, siendo realizado con el mismo rito con que fue consagrada la veneradísima Virgen de los Reyes de Sevilla a quien se celebra precisamente en el mes de Agosto.
CRÓNICA DE LA CONSAGRACION DE JESUS NAZARENO DE LA MERCED
Narrativa de Miguel Álvarez Arévalo
Después de 62 años 4 meses y 9 días de haber sido colocada la imagen de Jesús Nazareno de una capilla de la iglesia de la Merced, había crecido su fama a tal extremo que hubo de ser consagrada por el Ilustrísimo Obispo de Guatemala, Don Juan Bautista Álvarez de Toledo, el día 5 de agosto de 1717.
En el día 5 de agosto de 1717 el Ilmo. y Rmo. Sr. Br. y Mtro. Dos veces jubilado Don Juan Bautista Álvarez de Toledo dignísimo Obispo, consagro la Santísima Imagen de JHS Nazareno, para lo cual se saco de la capilla, y se puso con cuanta decencia se pudo en el presbiterio de el altar mayor de la iglesia la Merced.
A estos acontecimientos religiosos asistió, la Real Audiencia, el Ayuntamiento, el Cabildo Eclesiástico, las Órdenes Religiosas y los dominicos que apadrinaron el acto religioso. Pero el mayor realce les fue dado con la participación masiva del pueblo, que demostró su fervor como veremos más adelante, y con la magnificencia del rito católico, que en esa época gozaba de sus mayores esplendores, intensificados con el Concilio de Trento.
Para la mencionada consagración, la iglesia utilizo los mejores recursos de su ritual y la jerarquía eclesiástica la vestidura litúrgica que se describe: Señoría Itma. De pontifical y capas y el Sr. Dean y el Sr. Maestre escuela; con dalmáticas el Sr. Tesorero y el Sr. Mencos, el Br. Don Joseph de Hoyos y el Br. Don Feliciano de Arrivillaga, también capas magnas y otros dos sacerdotes también con dalmáticas todas rosadas.
INICIO DE LA CONSAGRACIÓN
Esta celebración fue única en Hispano-américa y tradujo el hondo misticismo del pueblo guatemalteco, muy propio de ese siglo. El ritual que se practico es el mismo que se utilizo en España para un acto similar: “pero los más singular que tiene dicha devota imagen (Jesús de la Merced) es estar consagrada en la misma forma, y con los mismos ritos, que se consagro a Ntra. Sra. De los reyes de Sevilla”.
La ceremonia se inicio después de que el Ilmo. Obispo bendijo el incienso y el pan; ungió primero la cruz en cinco partes: en los cuatro extremos y en el centro. El padre Provisional de Santo Domingo el R.P.M. Fray Joseph Xirón, sostuvo el crisma que se empleo para la consagración, el R.P.M. Fray Vicente Guerra los algodones, los padres Fray Agustín Cano, fray Antonio de Arriaga y Fray Damián Regil, todos dominicos, tenían el pan y otras cosas del uso sacro.
En seguida se ungió la imagen: primero en la frente luego en el pecho, en las manos y en los pies. Concluida la consagración se canto el Te Deum.
REGOCIJO POPULAR
La participación popular fue de suma importancia en esta celebración, pues dio lugar a numerosas manifestaciones de carácter folklórico: castillos de 400 tiras saraos, carros triunfales y carrozas alegóricas.
Los castillos forman parte de los fuegos artificiales y se usan durante las festividades tradicionales. El castillo que se quemo para la consagración de Jesús de la Merced fue grandioso porque tenía 400 tiros o sea 400 canchinflines. Hubo también mascaradas o desfiles de disfraces en que participo, además del pueblo, la autoridad civil.
Todos estos elementos de índole popular los menciona el libro de Aumentos de la Cofradía de Jesús de la Merced: “acabado esto, se entono un Te Deum Laudamus. Y disparo salva tres compañías que estaban para este fin en el compás de la iglesia, y un castillo de 400 tiros que al cual prendieron fuego, y luego comenzó el repique general, desde la Catedral abajo, todos los conventos desde esta hora (que serian las diez) los regocijos de mascaradas, saraos, carros triunfales y muchas demostraciones de júbilo, esta noche del jueves hubo repliques generales, habiendo sido la tarde más plausible que ha vivido Guatemala”.
Acerca de esta misma celebración, Juarros indica que: “se hizo esta extraordinaria función con extraordinaria pompa, se adorno la iglesia por dentro y por fuera, pusieron dos aparadores con 200 fuentes y 60 picheles de plata” El adorno de la iglesia al que alude Juarros es también otra manifestación popular, todavía con vigencia en el país. Las cortinas o colgaduras son características propias de Guatemala y el adorno exterior suele ser aun el pino o gusano y el chorizo de encino.
Pueblo, nobleza, autoridades civiles y religiosas, participes todos en este magno acontecimiento religioso de la época, hicieron posible la ostentación lograda.
Las fiestas de consagración se prolongaron por ocho días. El documento de la cofradía las describe así: “El viernes por la mañana volvió a venir la Religión de Santo Domingo y la Merced salió con San Pedro Nolasco a la esquina de Santa Teresa a recibirla, y después de esta juntas, La Real Audiencia, Ciudad, Sagradas Religiosas y concurso cual nunca se ha visto, salió la procesión por el compás de la iglesia donde esta otro escuadrón de infantería, los R.R.P.P.M.M. de santo domingo con estolas las iban cargando la Santísima. Imagen (Sto. Domingo) entro la procesión en los claustros, canto la Misa es día (6 de agosto de 1717) el R.P.M. Fray Joseph Xiron, provincial de la Sagrada Orden de Predicadores. El evangelio el R.P.M. Fray Antonio de Arriaga, la Epístola el R.P.M. Fray Damian Regil todos maestros del Orden de Predicadores, predico altísimamente el R.P.M. Fray Antonio de Loyola de el sagrado Orden de Ntra. Sra. De la Merced, y acababa la misa salió la Religión de Santo Domingo con su patriarca para su casa, acompañándolo la Religión de la Merced con su patriarca (San Pedro Nolasco) y prosiguiendo los festines por los ocho días más, y el señor se coloco en su nicho el sábado 7 de agosto en la noche”.
Esta Celebración no debe verse únicamente como un hecho religioso aislado del sistema colonial, sino como parte de la estructura política del Reino de Guatemala. También constituye un hecho importante en el ámbito de la cultura, fruto de las relaciones económico-sociales de la colonia.
Del brillante sermón de la Consagración se extrae lo siguiente:
Ese mismo día 6/agosto/1717 Fray Antonio de Loyola, regente de los estudios del Convento de Ntra. Señora de las Mercedes, examinador sinodal del Obispado de Guatemala, predicó un importante Sermón. Siendo dividida en tres partes Exordio, Desarrollo y Conclusión.
*** A CONTINUACIÓN SE RESPETA ORTOGRAFIA ORIGINAL DE LA EPOCA ***
“Que festivo alboroto es este, que tanto nos inquieta. A Jesús le hecho el agua un baptista, que novedad puede ser para tan grande alegría el que nuestro baptista le ponga los santos oleos. Baptizó a Jesús en al rivera del Jordán San Juan Baptista, y os lo unge con los Santo Oleos quando lo consagra, otro baptista grande, Principe de la Iglesia, y primer parroco de ella, que novedad ai pues oi, para esta ruidosa fiesta, nada mas que lo dicho: Su soberana uncion misteriosa. Es Christo lo mismo ungido y siendo Jesús Nazareno, lo mismo que consagrado. “
“El Rey, el sacerdote y el profeta, eran en la antigua ley ungidos, Christo fue gran sacerdote, Rey de Todos los reyes, y profeta grande: No era novedad en Christo lo ungido. Es la novedad en su imagen a esta novedad de esta imagen ungida es la que oi con mucha razón se celebra.”
“Fue Jacob a buscar esposa a Mesopotamia y aviendo cogida la noche en el mismo camino, se acostó a dormir en el suelo, sirviole de pabellón el cielo, y de almohada para su mayor descanso una piedra, cogió el sueño, y entre sueños vio aquella escala tan maravillosa y el señor arrimado a la escala”.
“Alto pues, con razón el patriarca unge, y consagra esta piedra con razón ensalza, por imagen mas propia de lo vido, porque si lo que mirava entre sueños era el señor con la cruz, nadie mejor que esa piedra lo representara pues fue Christo la piedra del sufrimiento arrimado siempre a la cruz.”
“La transfiguración gloriosa que el Sangrado Evangelio de oi nos menciona (Era el día de la transfiguración) mas oi mismo es el día que en los altos fines de la providencia nos ponen a la vista dos. La transfiguración de Jesús en el monte Tabor es una, y la transfiguración de esta imagen quando nuestro Ilmo. Príncipe la consagra es otra. El redemptor Nolasco y en lugar de el encendido Zelo de Elias la ardiente antorcha de los mejores gusmanes, el gran padre Santo Domingo”.
“Y lo mismo dize a los vecinos de Goathemala esta divina ymagen transfigurada, que no temamos, puesto que la tenemos entre nosotros, porque a de salir a la defensa nuestra siempre que se ofreciere, porque es verdadera ymagen de nuestro Redemptor Jesús en su pasión dolorosa, y eso le basta para defendernos.”
“O mil veces dichosa y siempre santa ciudad, dichosos nosotros los que vivimos en ella, tenemos en esta sagrada ymagen , quien nos defienda y nos libre de todo el mal, quien nos favorezca y nos haga bien, quien salga y saque la cara si fuere necesario para cualquiera que lanze una invasión enemiga: por que es verdadera imagen de nuestro capitan Jesús, para que quede de oi en adelante por consagrada y ungida, hecha reyna de las demás imágenes; queda sin tener segunda ni semejante: queda ya gloriosamente transfigurada, por favor especial de ntro. Ilmo. Principe, pero no puede negarsele tambien el influjo, al devoto de que lo a conseguido y solicitado, puesto que a el en primer lugar se le debe”“O mil veces dichosa y siempre santa ciudad, dichosos nosotros los que vivimos en ella, tenemos en esta sagrada ymagen , quien nos defienda y nos libre de todo el mal, quien nos favorezca y nos haga bien, quien salga y saque la cara si fuere necesario para cualquiera que lanze una invasión enemiga: por que es verdadera imagen de nuestro capitan Jesús, para que quede de oi en adelante por consagrada y ungida, hecha reyna de las demás imágenes; queda sin tener segunda ni semejante: queda ya gloriosamente transfigurada, por favor especial de ntro. Ilmo. Principe, pero no puede negarsele tambien el influjo, al devoto de que lo a conseguido y solicitado, puesto que a el en primer lugar se le debe”.
Por la gracia de Dios hasta nuestros días ha llegado el recuerdo de este solemnísimo acto, quedando plasmado en la bendita imagen de Jesús de la Merced.
Por: Cofrade Guatemalteco (Nestor)
Fuente: COFRADES cofrades.sevilla.abc.es www.jesusnazareno-parroquialamerced.org
Fotos: feydevocion.com/galeria y jesusenguatemala.com