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HISTORIA DE LA IGLESIA CATÓLICA

​CAPÍTULO 15 "LUTERO Y LA REFORMA PROTESTANTE"

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

1. Situación de la Iglesia en esta época

Desde comienzos del siglo XIV el papado entra en una nueva crisis. Los reyes de Francia obligan a los papas a dejar Roma y trasladarse a la ciudad francesa de Aviñon. Nueve papas estuvieron en Aviñon desde el año 1305 a 1423. Había muchos intereses políticos y económicos por medio. La Iglesia no acababa de lograr su plena libertad frente a los poderosos. A finales del siglo XIV hubo tres papas al mismo tiempo. No se ponían de acuerdo sobre cuál de ellos era el verdadero. En el año 1414, el Concilio de Constanza depone a dos de ellos y nombra a Martín V.

La Iglesia vivía en una situación lamentable:

  • Preocupación de los papas en defender su poder y autoridad y en embellecer templos, en vez de preocuparse por la evangelización y la renovación de la vida cristiana del pueblo.

  • Intereses políticos de la Curia Romana.

  • Irresponsabilidad de muchos obispos y abades.

  • Poca formación del bajo clero.

  • El Tribunal de la Inquisición.

En cuanto a la vida cotidiana de los cristianos, había una gran escasez de formación religiosa del pueblo. La lectura de la Biblia estaba prohibida para los laicos (esto con el fin de evitar que cualquiera malinterpretara los pasajes y produjera errores de doctrina, quedando exclusivamente la interpretación al Magisterio de la Iglesia). Se observaba cierto abandono de la práctica de los sacramentos, sobre todo de la Eucaristía. En contraste, crecía otras formas de devoción popular, a través de cofradías y hermandades. Había una exageración de devociones a santos y reliquias. Una gran cantidad de prejuicios, supersticiones, ignorancias y miedos se había ido arraigando con el tiempo en la vida del pueblo. Crecía la espectacularidad de las fiestas, pero disminuía el auténtico espíritu de conversión y vivencia del Evangelio.

 

Pero siempre el Espíritu de Dios, que no abandona a su Iglesia, hace surgir grandes profetas y santos que mantuvieron la luz del Evangelio y la esperanza de una profunda reforma de la Iglesia. Trataban de volver a los orígenes del cristianismo, llamando a vivir una vida más humana, sencilla y fraterna, libre de poderes y de alianzas con los poderosos. A parte de los profetas que ya mencionamos en el capítulo anterior, destacan también: Santa Brígida (año 1373), San Vicente Ferrer (año 1410), Santa Catalina de Siena (año 1380), laica, quien tuvo el valor de presentarse ante el papa, para llamarle a un cambio de vida.

San Bernardino (año 1444), Santa Juana de Arco (Año 1431), Juan Huss (año 1465), quien vivió cuando había tres papas y, él entonces, sólo reconoció la autoridad del Concilio de Constanza (1414-1418) y de Jesucristo. Fue excomulgado y condenado a muerte. Años después, San Pedro de Alcántara, Santa Teresa de Ávila y San Juan de la Cruz, quienes iniciaron la reforma de la Vida Religiosa.

2. Causas de la división

Había en toda Europa una creciente efervescencia de búsqueda de conversión, que se concretizaba en diversos movimientos reformadores, pero chocaban con una jerarquía acomodada y poderosa, que se creía la autoridad máxima en la tierra. Toda esa efervescencia explica por qué fácilmente los ojos de Europa central se fijaron en Martín Lutero, quien en octubre de 1515 colocó en las puertas de la iglesia de Wittemberg 95 proposiciones.

¿Quién era Martín Lutero?

Nació el año 1483 y murió en 1546. Era un sacerdote agustino alemán y teólogo. Era una persona religiosa. Sin embargo, tenía un carácter muy personalista, prepotente y apasionado. A Martín Lutero le chocó sobremanera que para concluir la Basílica des san Pedro, en Roma, algunos predicadores le dieran excesiva importancia al dinero que se debía dar para obtener las indulgencias. El papa León X puso a la venta las "indulgencias" con el fin de financiar la construcción de la basílica de San Pedro en Roma. Las "indulgencias" eran como un perdón dado por la Iglesia de las penas debidas por los pecados. Para ello, algunos predicadores aterrorizaban a los fieles hablándoles del infierno y del purgatorio para que las compraran. De este modo las "indulgencias" se convirtieron en un negocio.

Comenzó a protestar enérgicamente contra las autoridades eclesiásticas. Éste fue el primer paso. Luego, Lutero empezó a editar una serie de panfletos contra ciertas doctrinas de la Iglesia Católica. El carácter de Lutero no brillaba por la mansedumbre. Todo lo contrario. Sus denuncias las hacía con altanería y autosuficiencia e insultos. Se le llamó seriamente la atención de parte del Papa. La respuesta fue intensificar sus virulentos ataques a la autoridad eclesiástica. Todo terminó con la excomunión de Lutero. Martín Lutero se separó definitivamente de la Iglesia Católica y se casó con una ex-monja separando a la tercera parte de católicos de Europa en protestantes.

Según los teólogos, Lutero no dejó una exposición sistemática y ordenada de lo que era el Protestantismo. Puntos básicos básicos del protestantismo de Lutero son: la justificación se obtiene sólo por la fe sin las obras buenas. Sólo Cristo es el que nos salva sin necesidad de la Iglesia y los sacramentos. Sólo nos debemos basar en la Escritura y no en la Tradición y el Magisterio de la Iglesia. El sobrenombre de "protestantes" a los seguidores de la Reforma se lo dieron los católicos ante su actitud constante de protestar contra la Iglesia católica.

Lutero se hizo sacerdote sin tener vocación para ello, sólo porque tenía temor de quedar mal con Dios si no le cumplía el juramento que le había hecho en un momento de gran susto al sentir que le caía un rayo a un compañero de viaje. Pero al llegar al sacerdocio Lutero se halló con el problema de tener que guardar castidad sin tener fuerzas para ello. Las tentaciones de su carne lo dominaban como lo dice en sus cartas, y sentía miedo de condenarse por ello.

A Lutero, lo secundaron varios personajes importantes para el protestantismo, que comenzaron a difundir, internacionalmente, las ideas de Lutero. En Suiza se destacó Zuinglio. En Francia, Calvino. En Inglaterra, el rey Enrique VIII. Por motivos políticos, también muchos gobernantes se unieron a Lutero en su antipatía contra Roma. Mucho ayudó a la expansión de las ideas de Lutero su manera ágil y directa de exponer con frases sencillas y penetrantes su pensamiento. El pueblo, que no estaba preparado bíblica y teológicamente, lo aceptó con facilidad.

Lutero empezó bien. Quería una Iglesia más pura. Pero en vez de hacer la reforma que la Iglesia necesitaba dentro de ella misma, se separó y fundó otra Iglesia. Este fue su error. Aunque no todo el error de la división fue de Lutero. También el papa León X tuvo parte en la división. El papa y la curia romana no supieron escuchar ni comprender a Lutero. Más bien lo obligaron a separarse de la Iglesia. Lo excomulgaron. Lo expulsaron de la Iglesia.

3. La reforma dentro de la Iglesia

Hemos dicho que, además de Lutero, había otros muchos cristianos, sobre todo sacerdotes, religiosos y religiosas, que veían la necesidad de una reforma en la Iglesia. Los abusos de poder por parte de la Curia Romana, la pérdida de valores evangélicos y el descontento generalizado ante la corrupción existente en la Iglesia, era terreno propicio para profetas y reformadores.

Así, en ese tiempo aparecen, como ya señalamos, Santa Teresa de Ávila, San Juan de la Cruz, San Ignacio de Loyola, San Pedro de Alcántara, San Felipe Nery, San Juan de Ávila, San Juan de Dios y otros más. Estos fueron predicando el cambio de vida que la Iglesia necesitaba. Recorrieron pueblos y naciones reformando comunidades religiosas, y cristianas en general, para que vivan el espíritu evangélico de sencillez, fraternidad, oración y servicio a los más pobres. Todo esto lo hicieron dentro de la Iglesia, como es el deseo de Jesucristo (Jn 17,20-23). Comprendieron que la renovación que la Iglesia necesitaba había que hacerla dentro de ella misma, sin separarse.

Muchos de ellos fueron incomprendidos por la alta jerarquía y algunos perseguidos, pero no se desanimaron ni se separaron, más bien ofrecieron a Dios todos sus sufrimientos por la verdadera renovación de la Iglesia, que pronto dio su fruto. Al mismo tiempo, en el siglo XVI surge en la Iglesia un movimiento humanista inspirado en el teólogo holandés Erasmo de Rotterdam. Este movimiento se caracterizaba por su deseo de renovación y de vuelta a las fuentes del cristianismo. Buscaba una vida cristiana más profunda y evangélica, era contraposición con el cristianismo dominante que se basaba en el afán de poder, riqueza y en cultos vacíos de compromiso. Este movimiento humanista tuvo un fuerte eco en la Universidad de Alcalá de Henares, convirtiéndose en foco de renovación e irradiación para España y el resto de la Europa Católica.

4. Nacen las Iglesias protestantes

Lutero persistía en hacer la reforma separado de la Iglesia. Encontró algunos seguidores: unos de buena fe, pero otros movidos por intereses económicos y políticos, como fueron los gobernantes alemanes. Así nació la iglesia Luterana.

Después de Lutero, empezaron a formarse otras iglesias protestantes:

  • La iglesia Reformada, en Suiza, con los seguidores de Juan Calvino y Zwinglio.

  • La Iglesia Anglicana, fundada por el rey Enrique VIII de Inglaterra, quien se autonombro jefe de la iglesia.

  • Poco después nacen los Anabaptistas y Menonitas. Después los Bautistas. Más tarde los Presbiterianos y los Metodistas... De esta manera, las iglesias protestantes se fueron dividiendo. Sin embargo, el deseo del corazón de Cristo es que todos los que creemos en Él estemos unidos para que el mundo crea (Jn 17, 20-22).

5. Guerras religiosas

Así fue como Europa quedó dividida entre católicos y protestantes. Cada día eran mayores las confrontaciones de unos contra otros. Y empezó una guerra de religiones entre católicos y protestantes, dejando muchos muertos, ¡todo esto en nombre de Jesucristo!

Aquellas guerras "religiosas" estaban motivadas también por intereses económicos y políticos de los poderosos. Los gobernantes y ricos alemanes se pusieron al lado de Lutero, y los gobernantes de España y Francia al lado del Papa. Eran guerras entre cristianos, guerras entre hermanos.

También hubo protestantes, como Tomás Müntzer, para quienes no bastaba separarse de la Iglesia católica. Decían que había que llegar más a fondo, pues con separarse de Roma el pueblo no mejoraba sus condiciones de vida. Los campesinos seguían esclavos de los gobernantes alemanes. Entonces, Tomás Müntzer y sus seguidores iniciaron una rebelión contra los señores feudales, que así se llamaban los gobernantes y ricos terratenientes de aquel tiempo.

A Lutero, que era amigo de los gobernantes, no le gustó este levantamiento de los campesinos y echó contra ellos todo el poder militar. Los campesinos fueron derrotados. Hubo muchas masacres. Y Tomás Müntzer fue hecho prisionero, torturado y asesinado. Esto ocurrió en el año 1525.

6. Aspectos positivos de la reforma de Lutero:

  • El intento de vuelta a los orígenes de la Iglesia,

  • La importancia de la Sagrada Escritura como norma de vida para los cristianos,

  • Poner la Biblia al alcance del pueblo, traduciéndola al idioma del país,

  • La revalorización que hace de la salvación como don gratuito de Dios, como algo que no se puede comprar,

  • Haber fomentado las celebraciones de la Palabra de Dios,

  • Haber revivido la idea de Iglesia como Pueblo de Dios,

  • Recuperar el sacerdocio del Pueblo de Dios. Todos somos sacerdotes, aunque hay un ministerio dentro del sacerdocio común de los fieles.

  • Valorización de los laicos.

  • Respeto a la conciencia y libertad personal, frente a una tendencia de dominación de la conciencia.

Muchas de estas ideas de Lutero serán retomadas siglos más tarde por el Concilio Vaticano II.

7. Aspectos negativos de Lutero:

  • En primer lugar, la división que creó en la Iglesia, dando pie a otras nuevas divisiones. Sin embargo, Jesús quiere una Iglesia unida.

  • Su alianza con los poderes alemanes

  • Su oposición violenta contra las aspiraciones de liberación de los campesinos oprimidos.

  • Su actitud prepotente e inflexible.

  • El rechazo de las obras de servicio como expresión de la fe cristiana.

  • Su principio teológico de que sólo la fe salva sin la necesidad de las obras.

  • La denuncia de las costumbres poco cristianas que había entonces en la Iglesia.

8. La Inquisición

Aunque el Tribunal de la Inquisición fue fundado en 1232 por el Papa Gregorio IX, sin embargo, adquiere mayor vigencia después de la Reforma Protestante. Fue creado para reprimir herejías, brujerías y delitos morales. Usaba la tortura física para castigar y purificar a los "pecadores". El castigo era ejecutado por la autoridad civil. Los condenados por la Inquisición morían quemados vivos en la hoguera.

Hubo personas castigadas por la Inquisición que, después con el tiempo se ha comprobado que fueron verdaderos hombres y mujeres de Dios, incluso santos. La Inquisición, en muchas ocasiones, no sabía hacer distinción entre doctrinas luteranas y corrientes renovadoras católicas. A todas las confundía considerándolas sospechosas y heréticas. Por ejemplo, el movimiento humanista fue considerado sospechoso por la Inquisición.

En este tiempo se formó un estilo de vida en la Iglesia fundado por la práctica legalista de un sin fin de normas, la obediencia ciega a la jerarquía y al temor. La Inquisición contribuyó a ello. La Inquisición es una de las páginas más negras de la historia de la Iglesia, pero también es una leyenda negra con muchos inventos y mitos, con el fin de atacar injustificadamente a la Iglesia Católica.

Afortunadamente los archivos españoles están llenos de datos de primera mano, y poco a poco algunos osados investigadores están acabando definitivamente con todas las mentiras que durante siglos germánicos y anglosajones supieron extender hasta el punto de que hoy en día incluso los españoles y los hispanoamericanos las toman como verdades indiscutibles. Afortunadamente, la historiografía moderna está ahora mismo en un proceso de replanteamiento que ya podemos ver en este documental de 1994 creado por la BBC, producido pues por el país que más empeño puso en el pasado por crear la leyenda negra contra España y su catolicismo y por tanto difícilmente acusable de pretender favorecer a la Inquisición española. Si no nos cree a nosotros, es mucho más probable que crean a la BBC, este documental realmente les impactará https://www.youtube.com/watch?v=29__WZ9b7q4.

Información extra:

Fuente: "Historia de la Iglesia Católica" - 25 Edición- Fernando Bermúdez, Diócesis de San Marcos, Guatemala. Editorial Católica Kyrios. Autorizado por: Monseñor Álvaro Leonel Ramazzini Imeri, Obispo de San Marcos. / Católico o Protestante (Padre Eliécer Sálesman) / Dificultades con los Hermanos Protestantes (Padre Hugo Estrada s.d.b.)

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